La posición de profundo continúa evolucionando conforme a los jugadores que les piden hacer más para proteger la secundaria defensiva.
“La posición de profundo se está convirtiendo en más y más en una posición de esquinero”, explica el entrenador en jefe de los New England Patriots BILL BELICHICK. “Hubo tiempos en los que algunos de los profundos, particularmente los profundos fuertes, encajaban más como apoyadores que como profundos. Las demandas de la posición cambiaron.”
Los equipos procuran encontrar jugadores que puedan proteger contra los lanzamientos profundos y desbaratar receptores que vengan por el centro pero que también hagan las tacleadas clave como la última línea de la defensiva.
Entre la lista de cosas que los equipos buscan en un profundo están la versatilidad, la condición atlética, la dureza, la velocidad y la habilidad de leer y reaccionar ente diferentes ofensivas.
El profundo de Arizona ADRIAN WILSON, el de más años con los Cardinals en su novena campaña con el equipo, dice que una de las claves para su éxito ha sido reconocer formaciones.
“Lo más importante para mí es conocer la diferencia entre las distintas formaciones”, delata Wilson. “La formación es muy importante y conocer los esquemas de tu defensiva te permite realizar jugadas dentro de ese ámbito. Cuando una ofensiva se alinea en la línea de golpeo, siempre estoy buscando su formación. Observo la disposición de los receptores y la comparo con lo que antes estudié con las filmaciones durante la semana.”
El jugador elegido dos veces al Pro Bowl ayudó a los Cardinals a alcanzar el Super Bowl el año pasado por primera vez en la historia de la franquicia. En su carrera, tiene 19 capturas y 18 intercepciones y está cerca de convertirse en solamente el 10° jugador en la historia de la NFL –y apenas el quinto miembro de la secundaria– en registrar al menos 20 capturas y 20 intercepciones.
“Soy un mejor profundo ahora que cuando era jugador universitario”, refleja Wilson. “Me convertí en un mejor jugador porque aprendo cosas en el curso de cada temporada. Maduras como jugador y te permite estar un poco más enfocado en lo que necesitas para hacer tu trabajo en este nivel.”
En el Sorteo de la NFL del año pasado, seis profundos fueron seleccionados en las primeras tres vueltas. Entre esos estaba el profundo de los Cardinals RASHAD JOHNSON, que fue seleccionado en la tercera vuelta (N° 95) proveniente de Alabama.
“Para ser como Adrian, que es un jugador franquicia y un líder, es algo en lo que trabajaré día a día”, anticipa Johnson.
Wilson, que también fue seleccionado en la tercera vuelta (N° 64 en 2001), le transmitió a Johnson y a otros jugadores jóvenes la importancia del trabajo duro.
“Simplemente trabaja duro”, dice Wilson acerca de su mensaje a los más jóvenes jugadores de los Cardinals. “Requiere un montón de trabajo duro convertirse en un buen profundo en esta liga. Lo más importante es mantenerse en la sala de películas y asegurarse de entender cuál es el esquema del equipo. Esa es la clave para un profundo.”
Llegando a la liga en 2001, Wilson moldeó su juego tras el miembro del Salón de la Fama ROD WOODSON, ahora analista de NFL Network.
“Rod Woodson fue gran parte de cómo evolucioné como jugador, porque él podía hacer todo”, recuerda Wilson. “Yo quería reflejar mi juego en el de uno de los más grandes que era capaz de hacer de todo: marcar, lanzarse en carga, ser sólido en el juego terrestre y también en el aéreo.”
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